El grupo de indignados de la plataforma 15-M de Lugo organizó ayer un mercadillo de trueque en los soportales de la casa consistorial. En él recogieron productos que los lucenses decidieron donar para ponerlos a disposición del público. El cometido fue que todo el que pasase por la praza Maior a partir de las siete y media de la tarde pudiese dejar o coger objetos sin dar nada a cambio. Dada la expectación generada entre los visitantes, los indignados no tienen duda de que este tipo de iniciativas seguirán repitiéndose por toda España.
A los pocos minutos de abrir este improvisado mercadillo ya eran muchos los lucenses que se acercaban a dar objetos (generalmente libros o cedés), recoger alguno de los que necesitaban (ropa u objetos del hogar), y mostrar su apoyo a este tipo de iniciativas. Según indicaron desde la plataforma, lo que intentan con estas actividades es que los ciudadanos se conciencien de la importancia de reutilizar y reciclar los materiales. Por ese motivo, dentro del mercadillo organizado ayer también celebraron un pequeño concurso en el que los participantes tenían que demostrar cuanto sabían de reciclaje.
Pese a que a últimas horas de la jornada el número de objetos que quedaban en el mercadillo era ligeramente inferior a los que hubo al comienzo, integrantes del 15-M indicaron que lo que harán en los próximos días con lo que sobre será destinarlo al Banco de Alimentos. Aunque pocos de los productos recogidos estaban relacionados con el mundo de la alimentación, las prendas y algunos de los útiles si pueden ser necesarios para los que acuden cada día a esta organización. Asimismo, los indignados señalaron que si por parte del Banco de Alimentos no quieren hacerse cargo de libros, cedés, deuvedés, u otros enseres, los llevarán al Centro Social Vagalume, ubicado en la rúa Nóreas.