La Generalitat flexibiliza las restricciones al agua tras las últimas lluvias. Los pantanos de las cuencas internas de Cataluña alcanzan el 24 %, su mejor registro desde agosto; el de Sau ha multiplicado por cinco sus reservas
07 may 2024 . Actualizado a las 13:43 h.El Gobierno catalán ha levantado este martes el estado de emergencia por sequía, que ha durado poco más de tres meses, gracias a las lluvias de las últimas semanas y sus aportaciones a los embalses. La decisión llega a solo cinco días de las elecciones catalanas.
Las lluvias de las últimas semanas son suficientes para salir de la fase más grave contemplada en el Plan Especial de Sequía, la de emergencia; a partir de ahora seis millones de catalanes de 202 municipios, entre ellos Barcelona y su área metropolitana, estarán en fase de excepcionalidad. Esto significa que el consumo medio por persona y día —incluyendo el turismo, la agricultura e industria— deberá ser inferior a los 230 litros. En emergencia, el tope se situaba en 200 litros por persona y día.
Cree el consejero de Acció Climàtica, David Mascort, que la situación actual podrá mantenerse durante el próximo verano «sin tener que aplicar nuevas restricciones ni volver a la emergencia», una buena noticia para el turismo y la hostelería, y también para los agricultores, puesto que al salir de la emergencia los payeses de los alrededores del Ter, una de las zonas más castigadas por la sequía, se aseguran un riego mínimo para sus campos.
Aumento de las reservas
Las últimas lluvias han incrementado en seis puntos las reservas de los pantanos de las cuencas internas catalanas, que en una semana han pasado del 18 % de su capacidad al 24 %, una cantidad de agua que no se veía desde mediados de agosto del 2023, hace casi nueve meses.
Sirva como ejemplo el embalse de Sau, en la provincia de Barcelona, convertido en la principal referencia visual de la sequía en las cuencas internas de Cataluña. En este pantano, que llegó a estar prácticamente vacío —hace una semana estaba al 2,5 % de su capacidad—, la sequía hizo aflorar las casas y el campanario del pueblo de Sant Romà de Sau. Tras las importantes aportaciones de lluvias registradas la última semana ha subido de nivel hasta el 14 %, pasando de almacenar solo cuatro hectómetros cúbicos a los 21 de ahora, cinco veces más. De hecho, la provincia de Barcelona ha ganado en el último episodio de lluvias 25 hectómetros cúbicos, más que en los 50 días anteriores.
Según el último balance de la Agencia Catalana del Agua (ACA), con datos de este martes, los embalses internos de Cataluña han alcanzado un volumen de 167 hm3, con lo que se ha ganado más de un 35 % en una semana. Aunque el temporal está remitiendo, en los próximos días se espera que sigan llegando caudales por las escorrentías y los deshielos en el Pirineo.
Los expertos advierten sin embargo de que la escasez de agua sigue siendo un desafío y que se necesitan medidas a largo plazo para garantizar el abastecimiento en la región.