El mundo paralelo de Héctor Francesch

VIGO

Afundación expone hasta el 20 de julio el proyecto artístico Colección de favoritos

08 may 2024 . Actualizado a las 00:52 h.

Colección de favoritas es la propuesta artística de Héctor Francesch (A Coruña, 1977), comisariada por Matilde Rodríguez, que se puede ver en la sala de exposiciones del Teatro Afundación (Reconquista s/n) hasta el 20 de julio. Está compuesta por 37 piezas originales, realizadas en distintas técnicas y formatos, que recorren veinte años de trayectoria del artista gallego. «Botando unha mirada cara atrás na miña obra, recoñézome en todos os momentos recollidos nesta exposición. Estou moi de acordo con Matilde Rodríguez cando di que é unha viaxe a diferentes presentes», explica el artista, que rechaza calificar este compendio de veinte años como una retrospectiva de su obra.

El recorrido expositivo comienza en el año 2004 con una serie de pinturas en las que el artista se sumerge en distintas referencias a la cultura urbana y a figuras clave de la pintura, como el propio Picasso, del que reinterpreta las Señoritas. Las marcas comerciales o los iconos contemporáneos, como los Playmobil, también ayudaron a Héctor Francesch a encontrar su sitio en el arte contemporáneo en sus primeros pasos en el mundo de arte.

Tras la crisis de finales de la primera década del siglo, que afectó de una manera contundente al mundo del arte, Francesch gira su trayectoria para sublimar objetos cotidianos y convertirlos en artísticos. Es de esta época la calavera de gominolas, que aúna la propuesta visual con un toque de atención a la alimentación que damos a los niños en la sociedad actual.

Esa peculiaridad se repite en la obra de Héctor Francesch ya que contiene distintos niveles de observación, desde la contemplación estética sin más, a la reflexión en torno al mensaje que encierra. En este aspecto, el artista muestra una pieza que representa una crisis creativa personal a través de un cuadro en el que el pinta la palabra nothing sobre un lienzo en blanco. «Este resumo me transmite que eu busco coa miña obra un mundo feliz, un mundo paralelo que me dé forza na vida», resume el autor, que se confiesa como un artista en continuo aprendizaje